El día 17 de setiembre muy cerca de la desembocadura del río Bolaños en la playa de Rañal (Arteixo) por fin se dio mi primer encuentro con el pechiazul macho, el lugar era exactamente el mismo en el que he fotografiado a esta hembra.
Luscinia svecica (pechiazul y ruiseñor pechiazul, papoazul en gallego), macho:
Tras esta última foto emprendió un corto vuelo de unos diez metros hacia mi derecha, momento en el que veo a este ejemplar de Martín Pescador limpiando su plumaje con arena.
Alcedo atthis (Martín Pescador, picapeixe en gallego), hembra, estaba a una distancia de unos quince metros:
Ha sido en Baldaio -días después- donde me encontré con José Ramón Sánchez Bugallo y le comenté que había visto a un Martín restregarse contra la arena, a lo que él me contestó: "es típico de la especie liberarse de la grasa de su plumaje con la arena".
Qué guapo ese pechiazul! Me lo perdí, pero me alegro de que nos sigan visitando y de poder verlo con tanto detalle en tus fotos. Y muy chulo el martin pescador también. Ese día te irías contento pa casa :)
ResponderEliminarHola Juanda.
ResponderEliminarEfectivamente ha sido durante esos días que estabas en tu hermosa tierra; ¡fue un 2 x 1 maravilloso! La pareja de Martín Pescador ese día se dejaba ver a poca distancia.
Sí, regresé a casa muy contento.
Un abrazo.
¡Estás que lo tiras Rafa! Qué pasada ver dos especies tan hermosas a la vez. El martín pescador sí que tengo la suerte de verlo a menudo, pero el pechiazul, ¡nunca lo he visto! Es una de esas especies que se me resisten. Por lo que veo, tú has tenido más suerte. Me alegro.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Enrique.
EliminarGracias por pasar a comentar, te cuento, la espera para encontrarme con el pechiazul fue bastante larga, de muchas mañanas pero como habían compañeros que reportaban su avistamiento yo no dejaba de insistir, pero claro, ¡una cosa es verlo y otra el poderlo fotografiar!
En cuanto a la Sra. Martín hay una pareja muy activa y que te deja aproximarte bastante -para lo que es la especie- y fue todo un regalo, no te lo voy a negar.
Un abrazo.